Cada vez que le digo a alguien que soy Copywriter, me pregunta qué es. Es normal, yo también me lo pregunté la primera vez que oí semejante «palabro».
Su traducción literal es redactor; persona que tiene por oficio redactar textos para un periódico, una revista, televisión o radio.
Sin embargo, un copywriter es mucho más que un redactor. Es actor, es guionista, es psicólogo, es vidente, es detective y un poquito espía.
Me explico.
El copywriting está orientado a aumentar tus ventas, por tanto, el copywriter necesita estas capacidades para convencer y persuadir.
El redactor escribe para informar, sin más. No va más allá, no tiene segundas intenciones.
Sin embargo, un copywriter escribe textos para páginas webs, blogs y redes sociales, con la intención de conseguir un objetivo.
Realiza una investigación profunda, tanto de tu negocio como de tu audiencia, hasta encontrar las palabras adecuadas que conecten con ellos y les motive a realizar una determinada acción, que puede ser: comprar tu producto o tu servicio, suscribirse a tu web, acudir a un evento, etc.
Dicho así, parece que el copywriter pretende engañar, pero no.
Un buen copywriter trabaja siempre desde la premisa de que tu producto o servicio va a mejorar la vida de tus clientes.
Imagina por un momento que eres Josephine Cochrane y has inventado el lavavajillas.
No me podrás negar que el lavavajillas es uno de los mejores inventos de la historia.
¿Cuánto tiempo te ahorra al día?
Lógicamente, como inventor, piensas que te vas a forrar, pero, a la vez, sabes que vas a hacer feliz a muchas personas y eso está genial.
Vayamos, ahora, a la otra parte de la ecuación; existen millones de personas que cada día tienen que fregar los platos.
Esas personas pueden pasar por las siguientes fases:
Mientras tanto, tú (Josephine) no dejas de pensar en cómo vas a conseguir que la información sobre tu fantástico invento llegue a esos millones de personas que esperan la solución al gravísimo problema de fregar caaaaaada día.
No hay que ser un genio para saber que la respuesta es la Publicidad.
Ya sea a través de los medios tradicionales como radio o televisión, o por medios digitales (webs, blogs o Redes Sociales), necesitas que el mensaje llegue. Y cuando digo «llegue», me refiero a que cale en el cerebro de las personas.
Si tu mensaje no está bien redactado, pasará desapercibido y no obtendrás los resultados que buscas.
Por eso necesitas un copywriter. Él sabe cómo hacerlo.
Veamos varios ejemplos prácticos para que entiendas la diferencia entre un texto publicitario sin más y un texto publicitario con copywriting.
Entramos en una web cualquiera de un lavavajillas marca X y nos encontramos con los siguientes textos:
Texto 1
«Diseñados para ayudarte a brillar. Rápido. Eficiente. Inteligente».
Analicemos esta frase: ¿Cómo te ayuda a brillar? ¿A qué se refiere? Brillan los platos, brillas tú, tu cocina…
¿Esta frase resume el beneficio real que obtienes al comprar el lavavajillas?
¿Cuál crees que es beneficio principal?
¿Qué limpia los platos por ti?
No.
Ese es el beneficio superficial, el beneficio principal es más profundo.
El beneficio principal es que tendrás más tiempo libre para dedicarlo a otras cosas como ir al gimnasio, dar una vuelta o abrazar un árbol.
Además, si no tuvieras ese cajón desastre llamado lavavajillas donde meter la loza, tendrías que lavar, secar y guardar cada pieza que usases a lo largo del día para mantener tu cocina recogida.
Por tanto, vamos a tener en cuenta estos beneficios profundos y redactemos como un copywriter el mismo texto:
Disfruta de más tiempo libre para hacer lo que te apetezca.
Con nuestro lavavajillas marca X limpia y despeja tu cocina en minutos, y siente el relax de tener un hogar de revista.
¿Cómo lo ves?
¿Te das cuenta de la diferencia?
Sigamos.
Texto 2
«Conecta con el futuro del cuidado de la vajilla.
Inicia el ciclo desde cualquier lugar en el que te encuentres, configura el funcionamiento, activa recordatorios de limpieza o de compra de detergente y mucho más.
Conectar tu lavavajillas inteligente desde cualquier sitio ya es una realidad. Gracias a la intuitiva aplicación Home Connect, puedes controlar el programa de lavado de tu lavavajillas, configurar sus ajustes o incluso recibir alertas desde tu móvil».
Menudo rollo, ¿Verdad?
Me duermo, solo de leerlo.
En fin, sigamos.
¿Qué sentido tiene conectar tu lavavajillas desde el móvil?
Yo, cuando salgo de casa, le doy al botón de inicio en décimas de segundo. A priori, no veo el beneficio.
Sin embargo, reconozco que en este mundo de prisas en el que vivimos, se nos puede olvidar. No es agradable llegar a casa y encontrar los platos sucios.
Así que yo les haría la siguiente propuesta:
¿He cogido las llaves del coche?
¿Me he puesto desodorante?
¿Llevo la mochila del peque? ¿Le he puesto la botellita de agua? …
Salir de casa cada mañana es una locura.
No dejes que la tarea de pulsar el botón de inicio en tu lavavajillas ocupe tu cerebro y sea una razón más de este estrés innecesario.
Conecta tu lavavajillas, simplemente, cuando te acuerdes.
Con nuestro lavavajillas marca X podrás controlar el programa de lavado desde el móvil, estés donde estés.
Supongo que ya vas entendiendo el concepto del copywriting un poco mejor, pero ¡venga!, hagámoslo una vez más.
Texto 3
«Un nuevo nivel de inteligencia.
Los sensores de los lavavajillas marca X ajustan automáticamente el ciclo de lavado para optimizar el consumo de energía y de agua».
Texto con copywriting:
Gana dinero mientras friegas los platos y cómprate ese capricho que tanto deseas.
Nuestros lavavajillas marca X ahorran energía y agua en cada ciclo de lavado.
Ese es el trabajo del copywriter; identificar las necesidades más profundas y conectarlas con el producto o servicio que dará solución a esas necesidades.
Una conexión fácil a través de textos sencillos y claros (sin florituras), que jamás deben centrarse en explicar lo bueno que eres, sino en todo lo que puedes hacer para mejorar la calidad de vida de tu cliente.
¿No me digas que, después de toda esta explicación, aún te estás preguntando si merece la pena contratar los servicios de un copywriter?
Vamos a ver… ¿Alguna vez has oído la expresión «este producto se vende solo»?
Seguro que sí.
Pues ya te adelanto que eso es mentira, no hay nada que se venda solo.
Aunque tengas el mejor producto o servicio del mundo, si tus clientes potenciales no saben que existes, no saben dónde buscar o qué tienen que hacer para comprarte o contratarte, no tendrás éxito.
Claro, tú piensas: -en el mundo digital en el que vivimos, necesito una web bien chula-
y vas a buscar a un profesional que te diseña una web estéticamente perfecta.
Entonces crees que ya está todo hecho… ¡Error!
Las imágenes no venden.
Transmiten el deseo de comprar, pero solo el texto hará que tu cliente dé los pasos necesarios para que el dinero acabe por llegar a tu cuenta corriente.
El texto explica en profundidad por qué comprarte o contratarte será beneficioso para él.
Además, le guiará en el camino hacia la compra. Un camino que debe ser lo más sencillo posible porque, no nos engañemos, la paciencia es una virtud que está en vías de extinción.
Si el proceso de compra es largo y complicado, el comprador se cansará y acabará por abandonar la web antes de finalizarlo.
En conclusión; si no te preocupas por los textos, estás perdiendo ventas.
¿Entiendes, ahora, el concepto de copywriting? 😉
Seguro que sí. Peeeeeero, si aún así, todavía tienes dudas; plantéame tus preguntas en los cometarios y responderé con todo mi cariño.